Casa canaria, totalmente restaurada, que cuenta con todo el encanto rural y las comodidades necesarias para pasar unos días de relax. Lugar tranquilo, ideal para leer, oír música, escribir, pintar y practicar senderismo.

Está rodeada de amplias y cuidados jardines que aíslan y ponen en contacto directo con la naturaleza. Ubicada en una zona de medianía, 590 m aproximada de altitud, dentro de una finca de aguacates.

Las vistas son tanto de mar como de montaña dependiendo de la terraza o jardín que elija. Además dispone de una cueva que antiguamente sirvió de comedor-cocina, ahora convertida en barbacoa y zona de relax.

La distancia al centro del pueblo es de 2 km donde hay: supermercados, bancos, policía, médicos, bares, servicios de comida para llevar, salón de belleza.